viernes, 19 de diciembre de 2014

Centro Municipal de Capacitación en Oficios: "Una obra de amor"

El jueves por la tarde, en dependencias del Instituto Tecnológico Rafaela (ITEC), tuvo lugar el acto de clausura del ciclo 2014 y entrega de certificados a los jóvenes cursantes del segundo año del Centro Municipal de Capacitación en Oficios.

Participaron del encuentro el intendente Luis Castellano; el secretario de Desarrollo, Innovación y Relaciones Internacionales, Marcelo Ortenzi; la subsecretaria de Economía Social y Empleo, Evangelina Garrappa; la secretaria de Desarrollo Social, Ana Theler; el coordinador de la Jefatura de Gabinete, José Luis Rossetto; la directora del espacio formativo, Carolina Pizzi; representantes institucionales y empresariales de la Fundación ITEC, entre otros funcionarios y referentes de diversas entidades de la ciudad, alumnos, familiares, docentes, capacitadores, tutores sociales, exintegrantes del organismo y público en general.

Al dirigirse a los presentes, el primer mandatario definió la labor del centro como "un acto de amor", y reconoció que "la satisfacción que percibo en los participantes, en sus padres, en los capacitadores, en el equipo de la subsecretaría de Economía Social y Empleo que lo lleva adelante, es la misma que siento yo".

"Quizás estamos plantando la nueva semilla de un gran cambio en el sistema educativo. La escuela a la que estamos acostumbrados se sostiene en un paradigma pensado para otra época, que no se ajusta a las necesidades y las realidades de todos los jóvenes y los adolescentes de hoy. Creo que en este espacio se puede hablar de igual a igual, y quienes aquí concurren pueden crecer y saber que son alguien, y sentir que la sociedad también se abre para ellos y los incluye", agregó.

El Centro Municipal en Capacitación en Oficios es un proyecto dedicado a capacitar jóvenes que han abandonado el sistema educativo formal. Es una oferta educativa alternativa que articula capacitación y formación técnica inicial, orientada a favorecer la inserción social y laboral de los cursantes.

Desde el año 2008, y en respuesta a las demandas de las familias con jóvenes que habían abandonado sus estudios secundarios, el municipio decide asumir un rol inclusivo, fomentando la formación como herramienta indispensable que habilite el goce pleno de derechos a los jóvenes ciudadanos a acceder a un empleo.

El programa se cimienta sobre un fuerte compromiso social y político, que apuesta a la construcción de espacios alternativos, creativos, dialógicos y vinculares, a la vez que brinda mano de obra capacitada al empresariado.

La propuesta pedagógica es integral y flexible, adecuada a las características de los participantes, a las demandas del mercado laboral y a la posibilidad de construcción de ciudadanía. Las áreas de formación son: formación general, informática y los espacios de taller: electricidad, tornería, soldadura y carpintería.

A esta formación se suma la posibilidad de realizar prácticas supervisadas en diferentes industrias y comercios de la ciudad. El propósito es que los jóvenes adquieran hábitos laborales y puedan poner en práctica en ambientes reales de trabajo lo aprendido en la institución.

Este proceso, cuenta con una duración de dos años iniciales, donde en un primer período los estudiantes adquieren nociones básicas de los talleres y en un segundo ciclo eligen profundizar su formación y especializarse en el oficio que es de su agrado.

Permanentemente se motiva a los jóvenes a poner en movimiento sus deseos y motivaciones, ya sea en la elección del taller, en el desarrollo de actividades o en el centro de prácticas supervisadas. A partir del tercer año tal como consta en el decreto el alumno cursará un bachillerato distancia que le posibilite culminar los estudios secundarios.